Capítulo 32: El estilo neorococó del primer polisón, 1868-1876

Bibliografía    Carmen Bernis, “El traje burgués”, en Menéndez-Pidal, Gonzalo, La España del Siglo XIX vista por sus contemporáneos, vol. I, Madrid: Centro de Estudios Constitucionales, 1988; Pablo Pena González, “La moda en la Restauración, 1868-1890”, en Indumenta, nº. 2, 2011, págs. 6-34: puedes leerlo aquí


Escotes y mangas pagoda, así como las gargantillas 
recuerdan a Madame de Pomnpadour.  
Madrid, Museo del Traje.

CLAVES ESTILÍSTICAS
Moños elevados
Mangas pagoda
Sobrefaldas con cola    
 

Neorococó     El estilo de 1750 y 1850 goza de nuevo del favor de las elegantes, prueba de que se encontraban particularmente identificadas y bellas con él. Ahora se expresará en las mangas pagodas y los volantitos. Sin embargo, el cabello no luce pequeños rizos, sino amplias trenzas y moños altos: la inmersión del polisón marca una horizontal potente que exige verticales para lograr el equilibrio visual. El juego de las sobrefaldas incrementa el atractivo del traje cuando se combinan tejidos.

 



Trajes de baile en La Moda Elegante, 1869. Los moños elevados aún no están de moda, porque encontramos el nuevo estilo en el año de su nacimiento.

Trajes de baile en 1873, madurez del estilo. Tissot, Demasiado temprano, Guidhall Gallery of Art.

A

Tissot, Still on top, detalle, 
Auckland Gallery of Art.


 
"Traje de viaje" dice La Moda Elegante, 1874. 
Pronto empezará a llamarse impermeable.

Sobretodos     Talmas, dorman y manteletas, todas ellas chaquetones que ahora reciben el nombre de "visitas", proceden del estilo romántico. El impermeable procede del vestuario masculino.


"Dorman", término que pasó rápidamente  para referirse a una 
manteleta o "visita", término este último también fugaz. 
La Moda Elegante, 1872.